miércoles, 30 de marzo de 2011

Propósitos

247. Concreta. —Que no sean tus propósitos luces de bengala que brillan un instante para dejar como realidad amarga un palitroque negro e inútil que se tira con desprecio. 248. ¡Eres tan joven! —Me pareces un barco que emprende la marcha. —Esa ligera desviación de ahora, si no la corriges, hará que al final no llegues a puerto. 249. Haz pocos propósitos. —Haz propósitos concretos. —Y cúmplelos con la ayuda de Dios. 250. Me has dicho, y te escuché en silencio: "Sí: quiero ser santo." Aunque esta afirmación, tan difuminada, tan general, me parezca de ordinario una tontería. 251. ¡Mañana!: alguna vez es prudencia; muchas veces es el adverbio de los vencidos. 252. Haz este propósito determinado y firme: acordarte, cuando te den honras y alabanzas, de aquello que te avergüenza y sonroja. Esto es tuyo; la alabanza y la gloria, de Dios. 253. Pórtate bien "ahora", sin acordarte de "ayer", que ya pasó, y sin preocuparte de "mañana", que no sabes si llegará para ti. 254. ¡Ahora! Vuelve a tu vida noble ahora. —No te dejes engañar: "ahora" no es demasiado pronto... ni demasiado tarde. 255. ¿Quieres que te diga todo lo que pienso de "tu camino"? —Pues, mira: que si correspondes a la llamada, trabajarás por Cristo como el que más: que si te haces hombre de oración, tendrás la correspondencia de que hablo antes y buscarás, con hambre de sacrificio, los trabajos más duros... Y serás feliz aquí y felicísimo luego, en la Vida. 256. Esa llaga duele. —Pero está en vías de curación: sé consecuente con tus propósitos. Y pronto el dolor será gozosa paz. 257. Estás como un saco de arena. —No haces nada de tu parte. Y así no es extraño que comiences a sentir los síntomas de la tibieza. —Reacciona. Monseñor José María Escrivá de BalaguerDe Camino

sábado, 26 de marzo de 2011

BUSCAR A DIOS...


No le reces a Dios mirando al cielo, ¡mira hacia adentro!


No busques a Dios lejos de ti, sino en tí mismo...


No le pidas a Dios lo que te falta: ¡búscalo tú mismo!, y Dios lo buscará contigo, porque ya te lo dio como promesa y como meta para que tú lo alcances...


No reproches a Dios por tu desgracia; ¡súfrela con Él! y Él sufrirá contigo; y si hay dos para un dolor, se sufre menos...


No le exijas a Dios que te gobierne a golpe de milagros desde afuera; ¡gobiérnate tú mismo! con responsable libertad, amando, y Dios te estará guiando ¡desde adentro y sin que sepas cómo!..


No le pidas a Dios que te responda cuando le hablas; ¡respóndele tú!, porque Él te habló primero; y si quieres seguir oyendo lo que falta escucha lo que ya te dijo...


No le pidas a Dios que te libere, desconociendo la libertad que ya te dió. ¡Anímate a vivir tu libertad! y sabrás que sólo fue posible porque tu Dios te quiere libre...


No le pidas a Dios que te ame, mientras tengas miedo de amar y de saberte amado. ¡Ámalo tú! y sabrás que si hay calor es porque hubo fuego, y que si tu puedes amar es porque Él te amó primero.

-San Agustín-

martes, 22 de marzo de 2011


Cuando nos sintamos demasiado atrevidos, recordemos nuestra fragilidad; cuando nos sintamos demasiado desmayadizos, recordemos la fortaleza de Cristo.

Santo Tomás Moro

viernes, 4 de marzo de 2011


¡Cuán altamente piensa Dios de los hombres! ¡Escuchemos cómo habla de ellos y cuánto hace por ellos: "Hagamos al hombre según imagen y semejanza nuestra"! Lo creó, pues, según su propia imagen.

"Hicístele poco inferior a los ángeles".
Dióle un compañero elegido de entre sus propios cortesanos.
"Coronástele de gloria y honor y le has dado el mando sobre las obras de tus manos."
"Es mi delicia vivir entre los hombres".
El hijo de Dios se hace hombre y queda con ellos en el Santísimo Sacramento hasta el fin del mundo.
"Vendremos a él y habitaremos en él": en nuestros corazones mediante su gracia.
¡Cuán diferentes son Dios y los hombres! No debemos pasar tan frios uno delante del otro. Debemos acercarnos más, estimarnos y amarnos más, así como Dios mismos nos aprecia, ama y honra!.-

"Dios creó inmortal al hombre y formóle a su imagen y semejanza". (Sabiduría 2,23)

-Santiago Koch,SVD-
De: Tu compañero de jornada la encuentro con Dios